Siempre he sido una persona de poco leer, más bien de nada leer. Lo cierto es que siempre he odiado leer tanto libros como revistas, tan solo me ha atraido alguna vez la prensa deportiva, pero no siempre. Y si hablamos ya de leerse las instrucciones de un electrodoméstico o aparato la llevo clara, creo que ni la portada.
Lo curioso es que una vez ya con internet la cosa cambió, y empecé a leer blogs y páginas que me resultaban interesantes y aunque parecía que ya me estaba gustando leer no se me había ocurrido (ni apetecido) nunca coger un libro y leer. De niño habitualmente prefería hacer puzzles imposibles, juegos de lógica o resolver problemas matemáticos antes que leer.
Sin embargo este año, y como nuevo propósito, en mi viaje al Reino Unido decidí comprar un libro y no uno cualquiera, sino uno muy concreto y que me permitiera matar tres pájaros de un tiro:
- Mejorar mi vocabulario e inglés escrito
- Leer libros!!!
- Tener en mis manos el libro de David Allen, «Getting Things Done«, porque estoy realmente harto de que me lo cuenten y no estar involucrado. Necesito optimizar!
Y bueno, decir que el libro lleva dos noches venciendo al ordenador, que se queda apagado. Tengo que reconocer que me está entusiasmando y más que dormirme me desvela y me quedo hasta tarde leyendo.
Algunos extraños tipos como yo seguramente prefieran prefieran hacer cosas antes que leer cosas, pero por qué no darle una oportunidad a un libro? Quizás después de leerlo podamos hacer cosas mejor.
Si lo termino seguramente me leeré este otro que estaban recomendando desde El Canasto. Todoodlist: technology is great, pencils are better. Lo curioso es que el autor lo vende como e-book, pero bueno, se hará un esfuerzo.
Puedo decir que me identifico bastante contigo en lo de la aversión por leer, sobretodo en la infancia pre adolescencia, para mi era un suplicio de pequeño, pero todo cambió cuando empecé a leer libros que me gustaron de verdad y no solo los libros que te obligaban a leer.
Pronto pasé a adorar los comentarios de texto de literatura y demás y a no tener miedo a dejar un libro a medias si realmente no merecía la pena.
Luego vino Internet y el poder leer un sin fin de información que realmente te interesa..
Y si eso lo combinamos con un espíritu curioso e inquieto ávido de conocimiento con los blogs los feeds y la blogesfera .. acabas leyendo por los codos, sobretodo on line y de vez en cuando algún libro también.
Ahora estoy con el de El libro negro del emprededor, te lo recomiendo es muy bueno.
Precisamente creo que eso es lo que pasa, que de pequeños nos obligan a leer libros y puede que, por que no nos gustan o simplemente por el hecho de ver la acción de leer como una obligación, hace que pierda todo su atractivo.
La inquietud esa de la que hablas creo que es la que me ha hecho retomar la lectura.
El libro del que me hablas tiene buena pinta, quizás lo lea en terminar éste.
Un saludo. Nos vemos en Iniciador Valencia!